“Decían que el Ritalín me ayudaría a concentrarme. Mentían”. El Ritalín (que en España se comercializa como Rubifén, Concerta o Medikinet) es muy adictivo y está clasificado por la Administración para el Control de Estupefacientes de EE. UU. (DEA por sus siglas en inglés, Drug Enforcement Agency) en la misma categoría que la cocaína.